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image3Cirugía Rull ofrece alternativas médico-quirúrgicas de calidad a aquellos pacientes que, por motivos médicos, personales o religiosos, quieren evitar el uso de transfusiones de sangre.

Para ello, Cirugía Rull pondrá a su disposición un equipo de profesionales expertos en el uso de las técnicas de Cirugía sin sangre que valorarán su caso y le informarán de la mejor vía para realizar con seguridad un tratamiento de calidad que minimice o elimine la necesidad de una transfusión.

 

¿Qué beneficios aporta al paciente la Cirugía sin sangre?

La utilización de la Cirugía sin sangre reduce las posibles complicaciones derivadas del uso de las transfusiones, como la aparición de reacciones inmunológicas o el contagio de la hepatitis, y facilita la recuperación del paciente.

La decisión de utilizar dicha cirugía también puede ser una opción personal para aquellos pacientes que únicamente aceptan transfusiones con su propia sangre o que rechazan cualquier tipo de transfusión.

¿En qué consiste la cirugía sin sangre?

La cirugía sin sangre realiza un control exhaustivo del sangrado mediante alta tecnología y técnicas médico-quirúrgicas específicas.

Antes de la cirugía se realiza una evaluación exhaustiva del paciente para detectar posibles riesgos o antecedentes de sangrado y se utilizan técnicas para estimular la producción de glóbulos rojos (eritropoyesis) y optimizar el nivel de hemoglobina.

Durante la cirugía, el equipo utiliza técnicas específicas para el control o la minimización del sangrado (uso del láser, bisturís ultrasónicos o sistemas de sellado de vasos). En algunos casos, pueden resultar útiles los recuperadores de sangre (cell-saver o redones recuperadores) en intervenciones limpias o sin riesgo de sepsis.

Después de la cirugía, se mantiene un exhaustivo control de los líquidos y del nivel de oxígeno en sangre y se utilizan recuperadores de sangre o fármacos para la estimulación de la eritropoyesis.